Distancia

Al abrir un diccionario y buscar la palabra “distancia” se pueden encontrar varios de sus significados, uno de estos es “diferencia.” Lo que es verdad, lo distinto suele parecer distante, como si estuviera lejos y fuera inalcanzable. Mientras más distinta una cultura, más lejano parece el país del que proviene. Cuanto más inusual es el actuar de un conocido, mayor distancia sentimos con esa persona. Existen algunas distancias que abarcan todo el significado de la palabra, personas, objetos, lugares extraños y alejados de la sociedad conocida. Pensando sobre esta rareza extrema, me acordé del libro “Mi abandono” de Peter Rock. Trata de un padre que vive con su hija en las profundidades de un bosque en las afueras de la ciudad. Esta pequeña familia no solo está lejos de la sociedad por vivir entre árboles y animales salvajes, también por su forma de vida e ideales que son extraños, distantes, a los considerados “normales”. A lo largo de la novela el lector se acerca a la cotidianidad del padre y su hija, sus reglas, los caminos que siguen, sus estrategias para mantenerse ocultos, hasta que alguien los descubre. Ambos recorren largos trayectos, juntos y separados, en la búsqueda de sí mismos, del otro y la libertad que habían conseguido en el bosque.


Desafecto es otro de los significados encontrados en el diccionario. La distancia por desafecto, tal vez la peor de las distancias. Surge de diversas maneras y se manifiesta en todas las relaciones ya sean amistades, parejas o familiares. Es la distancia más cruel especialmente cuando es aplicada por seres queridos justificando su ausencia e indiferencia en cuestiones de la vida privada que uno no puede modificar. Como sucede en “Los ojos del perro siberiano” de Antonio Santa Ana, este libro cuenta la historia de Ezequiel y su hermano menor. Ezequiel tenía dieciocho cuando se fue de la casa, el narrador tenía cinco, y murió con VIH a los veintiséis. Esto es lo primero que sabemos al abrir el libro, a lo largo que avanzamos en la lectura se revela al lector que la familia de estos chicos desplazó completamente a Ezequiel de sus vidas cuando se enteraron de su enfermedad, que no dejaron a los hermanos interactuar durante muchos años hasta que el menor tomo la iniciativa y fue en búsqueda del mayor. Es una historia sobre una familia distanciada y hermanos que hacen lo que pueden para acortar esa distancia entre ellos. Una de mis frases favoritas de este libro es “(…) Desde que estoy enfermo la gente me mira de distintas maneras. En los ojos de algunos veo temor; en los de otros, intolerancia. (…) Los únicos ojos que me miran igual, en los únicos que me veo como soy, no importa si estoy sano o enfermo, es en los ojos de mi perro. En los ojos de Sacha.” Me gusta como demuestra algo muy cierto, que a pesar de que con los animales haya distancias gigantescas por ser especies distintas y no tener el mismo modo de comunicarnos, siempre parecen entendernos mejor que nadie, aceptarnos mejor que nadie. Es asombroso como podemos entablar relaciones más profundas con seres completamente distintos a nosotros que con algunos pares. 


Hace unos años se volvió viral la gorila Koko, que en paz descanse. Ella fue adiestrada por la científica Francine Patterson, junto con otros científicos de la Universidad de Stanford, para que pueda utilizar el lenguaje de señas estadunidense. Hasta hoy en día hay debates sobre si la gorila en verdad comprendía la lengua o solo la copiaba. La idea de poder cerrar la distancia comunicacional entre humanos y animales siempre es atractiva. ¿Quién no quiere saber que piensan sus mascotas? Pero como ya dije, hay veces en las que no se necesita entender para que la distancia sea ínfima. Hay veces en las que parece que los animales son los únicos que en verdad entienden. Eso sintió el profesor Andrew Martin cuando volvió a su casa luego de pasearse desnudo por Cambridge en la novela “Los humanos” de Matt Haig. La distancia es retratada en esta historia de diversas maneras, la distancia que siente un hombre consigo mismo, con su esposa, con su hijo adolescente, y la distancia literal con su planeta de origen. En “Los humanos” se intenta descubrir si un ser alienígena puede acortar todas las distancias que lo separan de nuestra especie y, eventualmente, aprender a apreciar a los humanos con todas sus contradicciones y rarezas. 


El más literal, y conocido, de los significados de distancia es “intervalo que separa dos hechos o lugares.” Hay intervalos cortos como el de mi cuarto a la cocina, o de la entrada del edificio a la verdulería de la esquina, otros intervalos son más largos como el de mi casa en la Ciudad de Buenos Aires a la de una amiga en Comodoro Rivadavia (Chubut). Y otros están en el medio como desde el barrio Barracas hasta Moreno en Provincia de Buenos Aires. Lo bueno de estas distancias es que se pueden medir, en kilómetros (42.7 km de Barracas a Moreno), horas y minutos (1h 15min, con tránsito), canciones escuchadas en el viaje (ocho canciones), temas de conversación tocados en el camino (cinco), peajes pasados (dos), por cuantas veces se interrumpió la charla para cantar una muy buena canción (dos veces, temones eran), etc. Las razones para recorrer distancias pueden ser variadas, puede ser para ir al trabajo, a la escuela, la casa de un amigo u familiar. El medio de transporte también es diverso, puede ser a pie, en colectivo, auto, subte, tren, avión e incluso en barco. Puede suceder como en “El curioso incidente del perro a medianoche” de Mark Haddon, en el cual Christopher se ve motivado a viajar en tren para poder descubrir quien mato al perro de su vecina. Así sale de su zona de confort empezando un recorrido que lo afronta a su miedo a viajar solo, lo hace cuestionar el sentido común de los adultos que lo rodean y lo lleva a descubrir secretos familiares. 


Hay veces que la distancia en kilómetros parece alargarse gracias a la diferencia de idioma y cultura, en la actualidad esto ya no parece una barrera tan grande como en el pasado. El internet ha acortado todo tipo de distancias culturales, aunque no todas. En china circulan propagandas de un nuevo e innovador producto: una pajita que tiene un filtro para que no pase la pulpa de los jugos, o como es conocida en Argentina la bombilla para el mate. Es gracioso como por las diferencias culturales algo que en un país es moneda corriente en otro es algo completamente nuevo y extraño. Otros continentes siempre son interesantes, por eso no es de extrañar que el pequeño Toby Little cuando tenía cinco años haya empezado a enviar cartas a personas de todas partes del mundo para aprender sobre otras culturas. A su manera Toby encontró una forma para acortar la distancia entre países. Gran parte de sus cartas y las respuestas que recibió se encuentran en el libro “Hola mundo ¿Cómo estás?” Cuando el internet falla en acercar las culturas, siempre se puede contar con sus cartas.


Igualmente, las redes sociales suelen acortar distancias lo suficientemente bien, como fue demostrado en esta pandemia. Sin Google Meet, Zoom, WhatsApp, Mail, Instagram y un sinfín de aplicaciones más hubiera sido especialmente difícil y extremadamente solitario atravesar los últimos dos años. A través de las redes sociales mantuve amistades y generé nuevas, todo esto durante el último tiempo y en años anteriores ya que, por suerte, estos medios existen hace mucho como se muestra en “Loser” de Robertita. En esta historia el uso de las redes sociales es constante y real, se muestra como los jóvenes del 2007 interactuaban a través de Facebook y Messenger. Es difícil encontrar novelas que expresen las dinámicas de internet de manera correcta y esta efectivamente lo logra. “Loser cuenta la historia de Robertita, una freelancer con problemas para entablar relaciones románticas, que tiene mucho estrés, gran sentido del humor y pareciera que no puede vivir sin la casilla de mensajes de Facebook. 


En conclusión, la distancia tiene múltiples formas de manifestarse, se puede encontrar en todos los aspectos de nuestra vida tanto positivamente como negativamente. La distancia, diferencia, desafecto son aspectos, sensaciones y realidades que atraviesan a todas las personas, todas las historias. 
La primera vez que leí la consigna no supe que escribir, el concepto de distancia me parecía tan ajeno a pesar de lo transcurrido en los últimos años. Hasta que apareció la primer idea de lo que el texto podría ser, y junto a cada distinto significado de distancia recordaba un libro que la retrataba. Aunque no nos demos cuenta la distancia se encuentra en varios rincones, existe en distintas historias y aparece de todas las maneras. En este texto nombré seis libros, pero con seguridad afirmo que todas las historias recorren algún tipo de distancia. 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Análisis: Matar a un niño

Análisis: Del cuento breve y sus alrededores

Análisis: Las dulzuras del hogar