Reseña a Inés Garland

 

“Su mirada es de una vulnerabilidad aterradora.”

Una reseña a Inés Garland 

Inés Garland es una autora argentina nacida en 1960 reconocida mundialmente por su novela “Piedra, papel o tijera” que recibió el premio “Jugendliteraturpreis” de literatura juvenil de Alemania. Además de escribir sorprendentes y ricas novelas Inés Garland a creado a lo largo de los años una basta colección de cuentos, entre los que se encuentran “La arquitectura del océano” y “Una reina perfecta”, entre otros. 

Garland se destaca como autora por su habilidad para representar el mundo infantil, entre sus cuentos más renombrados la autora pone en el papel de protagonistas a niñas pequeñas que con inocencia, rebeldía y sabiduría enfrentan sus realidades de padres presentes, pero igualmente ausentes, niñeras malvadas y hermanas menores que deben proteger a toda costa. Un punto en común entre la mayoría de sus historias es que la protagonista y narradora suele ser una mujer, adolescente o una niña, demuestra en cada obra su capacidad para abrir las puertas a la realidad femenina y sorprender al público lector. 

En las antologías mencionadas, “La arquitectura del océano” y “Una reina perfecta”, Inés Garland se centra en relatar la pérdida de la inocencia, de las ilusiones, la búsqueda por el deseo y la felicidad. Entre sus hojas podemos encontrar desde una madre preocupada por darle unas buenas vacaciones a su hija mientras atraviesa una pelea interna para saber que es lo que desea y que debe dejar atrás para conseguirlo, junto con adolescentes aparentemente tranquilas que en su tímida fachada esconden la mayor rebeldía, hasta niñas poderosas y valientes que luchan contra una niñera perversa y sus malas intenciones. La autora ha admitido que varios de sus cuentos tienen un tinte de biográficos lo que les agrega mayor profundidad e intriga a historias que de por sí, ya son eternamente atrapantes. 

Garland con sus cuentos abre una ventana al mundo femenino y al autoconocimiento, mujeres que buscan desesperadamente y que a veces encuentran, en sus relatos viajamos con ellas y no solo desde el camino personal que las protagonistas puedan hacer sino desde lo delicadamente descriptiva que es la reconocida autora. Sus historias son fluidas, pasan como en un suspiro y te permiten ver con nitidez todo lo que sucede. No se necesitan grandes descripciones, cargadas de detalles y explicaciones para crear una escena, Inés esto lo sabe porque con sutileza y maestría nos traslada al tigre, a una casa, a un poso profundo con agua caliente y mohosa, a una fiesta catastrófica y a cualquier lugar al que ella quiera. 

En los cuentos de Inés Garland el lector acompaña a las protagonistas en su camino, las siente cerca, como conocidas, empatiza con ellas y espera que puedan encontrar el final feliz que tanto desean. Esa es la magia de esta autora, crea ambientes de compasión y respeto entre obra y lector que se le son enormemente agradecidos.  


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